Montaje del Escenario del Sorteo de Navidad
El 22 de diciembre de cada año se celebra uno de los eventos que más seguidores recoge a lo largo y ancho de España: el Sorteo Extraordinario de Navidad. Casi todo el mundo compra lotería, consumiendo de media unos 70 euros, lo que conlleva que prácticamente la totalidad de la población esté pendiente de la televisión, la radio o la prensa durante toda la mañana para comprobar si la fortuna les ha sonreído en esta ocasión.
El salón en el que se celebra el evento abre sus puertas a las 8 de la mañana, momento en el que se comienza a dejar pasar al público que desea verlo en directo. Pero antes de que esto ocurra se han tenido que realizar diversas tareas de organización para tener todo puesto a punto de forma previa. Más aún, este último año 2010 en el que se trasladó el evento hasta el Palacio de Congresos de Madrid hizo que se tuvieran que realizar diversas artimañas (tales como la extracción del bombo principal por una de las ventanas) para transportar los bombos de la suerte desde la sede de Guzmán el Bueno hasta su nuevo destino ya que, como es visualmente evidente, las dimensiones y el peso de los mismos tienen unas características considerables. No obstante, y tras la llegada al nuevo recinto, se procedió a la colocación de los bombos y a la introducción de las bolas en los mismos, previa comprobación de que no faltara ni un solo número.
Así es, el día 21 de Diciembre se realiza de forma pública el examen y recuento de las bolas que contienen, por una parte, los números y, por otra, aquellas que contienen los premios que se entregarán en el sorteo. Una vez completada la operación de recuento, el salón procede a ser desalojado y a custodiarse bajo llave todos y cada uno de los accesos al recinto, de manera que quede garantizada la seguridad y la imparcialidad del sorteo de Navidad.
Tras la apertura de puertas, que, como hemos dicho, se produce a las 8 de la mañana, se procede después a la constitución de la mesa que presidirá y velará por la seguridad del sorteo. Justo después las bolas se transportarán de forma mecánica hasta el bombo, donde serán depositadas para, posteriormente, cerrar los bombos y ser volteadas. Comienza así el Sorteo Extraordinario de Navidad que tantas ilusiones hace llegar a los distintos domicilios de los ciudadanos españoles.
Importante es tener en cuenta, y ya de forma posteriori al sorteo, que las tablas en las que se depositan los números premiados junto con su premio correspondiente quedarán expuestas al público durante una semana para que todo aquel que quiera acercarse a comprobarlo o como simple curiosidad pueda hacerlo sin problema alguno.